Algunas corrientes postulaban que nada podíamos decir de Dios, pues éste desbordaba absolutamente nuestra razón. Luego, sólo podía decirse algo sobre Dios de manera negativa, lo que Dios no es: Dios no es bueno, generoso, finito, mortal... Dios es mucho más que todo eso (más que bueno, más que generoso, in-finito, in-mortal). Nuestra razón no era capaz de Dios. Eso sí, quedaba la posibilidad de la vía mística, por la cual Dios mismo se daba conocer a alguien por medio de una revelación personal.
Otros, en cambio, afirmaban que el hombre sí era capax Dei o, al menos, lo era en alguna medida. Si bien Dios siempre desborda nuestro conocimiento, hay algo que podemos conocer de Él, puesto que nos ha concedido la facultad de la razón para ello. Así pensaba, por ejemplo, santo Tomás de Aquino.
Todo esto no es más que una introducción para llegar a CAPAX MUNDI. ¡Ah! ¿También era una expresión medieval? No... al menos, no que yo sepa. Pero lo que pasa es que yo veo que hoy, la pregunta por Dios no está en la preocupación de la mayoría de la gente. No es sólo que Dios ha muerto, como dijo Nietzsche, sino que Dios ha muerto y a nadie le importa (Lipovetsky, "La era del vacío").
La pregunta que sí importa es por el mundo. Capax mundi es una paráfrasis de la pregunta medieval de la que hablaba antes: ¿seremos capaces del mundo? ¿Es o será la Iglesia capaz de dar cuenta del mundo de hoy o del mañana? A veces pareciera ser que el mundo desborda a la Iglesia. Se tilda el discurso eclesial de anticuado, coercitivo, extemporáneo. ¿Puede la Iglesia dar una respuesta actual? ¿O es que la da y no se escucha?
De eso se trata este blog, de la relación de la Iglesia y el mundo. Yo creo que la Iglesia puede ser capax mundi, así como su Maestro lo es: una Iglesia que ama y abraza el mundo.
Además, este blog se trata de un trabajo para la Universidad. Como anoto en mi perfil, estudio filosofía en la Universidad Alberto Hurtado. Pero tomé un ramo de Periodismo Digital como electivo y llevaré adelante un proyecto de periodismo en un área específica durante un mes. Como se habrán dado cuenta, ése tema específico será la Iglesia.
Hola Hernan,
ResponderEliminarSoy Cepe y entretenido el tema. Pero una duda no es más de la misión de la iglesia tratar de ser más CAPAX DEUX? y en ese conocimiento adquirido guiar a su rebaño. Ser Capax Mundi parece más la misión de los políticos que de una iglesia...
(Por las dudas no soy católico jaja sino que agnóstico)
Hernán:
ResponderEliminar¡Me tinca mucho el tema! No comparto mucho con Cepe... los cristianos creemos que ser "capax Dei" es, a su vez, ser "capax mundi". Me parece, por lo tanto, muy sugerente el título del Blog.
¡Ánimo!
Javier, sj
Polo Labrín es hermano jesuita, trabaja como médico en el Chad hace como 15 años. Trató de comentar, pero no pudo, así que copió lo que escribió en Facebook:
ResponderEliminar"Hola Hernán, intenté comentar la primera entrada del blog y no hay manera de que me accepte el text. Ánimo y espero ansioso leer las entradas siguientes. Un saludos desde esta parte a veces un poco olvidada del mundo en el que intentamos estar a la altura....¿seremos capaces?
Polo"
Saludos Polo desde aquí,
Hernán sJ
Javier,
ResponderEliminarPero si como establece Hernan en el diagnóstico y dice que en la gente no hay una preocupación por dios, ¿quién entonces se preocupará de entender a dios y llenar este vacio?. Quién responderá las interrogantes a ciertas manifestaciones extremas de este mundo como son pobreza, desigualdad,hambre etc. pero a través de entender a Dios en su acción en este mundo (como explicar si estas situaciones son "voluntad de dios" o "voluntad del hombre", ¿cómo se llena el vacío frente a estas preguntas para los creyentes? y parece ser que la iglesia es quien esta llamada a llenar estos vacios).
Por que si somos los hombres los que provocamos estos extremos entonces debiese bastar con que los hombres solucionen sus problemas sin necesidad de un dios para hacerlo (en un mundo idílico los políticos darian respuesta a esto).
Creo que comprender a dios para la iglesia es verdad que le puede permitir entender como el mundo es. Pero creo que el fin de esta no es comprender el mundo, para eso estamos los simples humanos (aunque también nos desborde el mundo).
Hola Cepe,
ResponderEliminartanto tiempo! Varias cosas a lo que comentas:
1. No es que la Iglesia por ser "capax mundi" deje de ser "capax Dei", no son opciones excluyentes.
2. La Iglesia intenta ser "capax mundi", pero eso no excluye la participación de todos los demás actores sociales. Comparto contigo que todos los seres humanos tenemos algo que decir sobre el mundo.
2. La Iglesia debe tratar de decir algo sobre Dios, más aun, es su Misión anunciarlo. Eso sí, es positivo que el Concilio Vaticano II (1962-65) haya dicho que hay semillas de Dios también fuera de la Iglesia, pues cubre el riesgo de que la Iglesia crea que posee la única verdad sobre Dios. Ese riesgo de fundamentalismo está, me imagino, en toda religión; por eso es bueno el reconocimiento del Concilio, que en realidad sólo vuelve a decir la enseñanza de Jesús a sus discípulos: Dios no ama a un pueblo elegido de manera exclusiva, sino que el amor de Dios es incluyente: en él cabemos todos.